Hace unas semanas, y después que las palabras de Gabriel Waisberg levantaran polvareda -como en otras ocasiones- se pensó en la posibilidad de que se hiciera un tiempo para escribir su propia columna en este sitio. Afortunadamente le interesó la idea, y de ahora en más cada quince días -o un poco más- se publicarán aquí sus reflexiones sobre la vida y la obra de Raúl, y también otras consideraciones -pensamientos, notas de viajero- que hacen también a la filosofía de un defensor inclaudicable del universo Barón Biza.
Yo soy uno de los tres "Amigos" que hace algunos años atrás comenzaron a rescatar del olvido a un gran artista y a hacer la reivindicación de su obra literaria, arduo trabajo ya que como es de público conocimiento, Raúl Barón Biza fue uno de los escritores (si no el que más) perseguido durante una negra etapa de la Argentina.
Por si Usted no lo sabe, su obra fue secuestrada y quemada por la mayoría de los gobiernos de facto inclusive del último "proceso militar".
Y como sucede con los Amigos de verdad, con el transcurrir del tiempo esos lazos de amistad si uno los alimenta adecuadamente crecen, se acentúan y se transforman en algo muy fuerte, el cariño va nutriendo esa amistad haciendo esos lazos casi indestructibles.
Yo soy de las personas que creen que cuando se ama a alguien se lo debe querer como es, aceptarlo con sus virtudes y defectos, con sus aciertos y con sus errores, con sus cosas buenas y con las malas, así debe de ser, cuando se quiere mucho a alguien, solo hay que entender y respetar, y si no lo comprendemos hay que apuntalar igual, estar en las alegrías y apoyar firmemente en las tragedias y por sobre todo hacerlo en las circunstancias más difíciles de la índole que sean, las personas que tengan hijos les será más fácil comprender lo que estoy diciendo.
No quiero que se me malinterprete, no me considero un tonto ni un Quijote, Raúl no era perfecto, tenía falencias como cualquier ser humano, yo estoy también muy lejos de serlo pero ahora soy su acérrimo defensor por muchos motivos. Uno de los principales es que creo a haber llegado a comprender su sentir y su pensamiento pero desde hace un tiempo a esta parte lo que más me motiva en defenderlo es la injusticia de la que ha sido víctima.
La Prensa y los medios durante los últimos 45 años, que bien le aprovecha de tanto en tanto con espectaculares titulares, no ha hecho mas que abofetearlo, pero lo más injusto en lo que a él se refiere es que no está aquí para defenderse y como sabemos el derecho a la defensa de las personas es inalienable.
Odio ver cómo se hace leña del árbol caído, lo odio tanto como a aquel que le proporciona a un niño una golpiza.
Así que casi sin darme cuenta me transformé en uno de sus abogados naturales, me causa un poco de gracia el pensar en ese viejo titular de una nota que nos hicieron años atrás en La Voz del Interior donde nos bautizaron "Los Abogados del Diablo".
Estimado lector, le tengo una novedad: Raúl no era ningún diablo.
Como dos de sus hijos ya no están en este mundo (y el que queda vivo brilla por su ausencia) es que estoy escribiendo estas sencillas palabras para honrar su memoria.
Yo me pregunto...¿qué clase de amigo sería si no lo defendiera?...un mal amigo, eso sería. Un pésimo amigo.
Platón decía: "la peor forma de injusticia es la justicia simulada"; y también nos enseñaba que cuando la injusticia perdura en el tiempo se nos hace muy difícil discernir después cual es la verdadera justicia.
Bien, ya ha transcurrido demasiado tiempo, ya es hora de que alguien haga algo para revertir esta, que es la madre de las injusticias a que una persona haya sido sometida, simplemente por tener dinero y por tener un pensamiento y un sentir diferente, muy adelantado a su época.
Raúl era una persona muy especial. En muchos aspectos fue un visionario, pocos son los que han comprendido su pensamiento; pero eso sucede con todos los grandes pensadores.
El pobre criterio y cerrado razonamiento de quienes lo atacaron y agredieron tanto en el pasado como en el presente no sólo demuestra su incapacidad para entenderlo sino también su hipocresía.
Ante todo, se le debe respeto como a cualquier persona. Aunque discrepemos con su ideología o su accionar. Y no me vengan con lo que está bien o lo que está mal.
¿Qué es lo que está bien y que es lo que esta mal? Ello solo obedece a un determinado momento y a las leyes que hacen los políticos de turno y los mas poderosos que en definitiva son los que las manipulan de acuerdo a sus intereses.
El bien y el mal solo lo determinan las ordenanzas a las que estamos sometidos y las mismas son cambiadas y modificadas permanentemente.
No quisiera entrar en el terreno de burdos ejemplos.
Así que lo que ayer estaba mal hoy, puede de pronto estar más que bien, y terminar siendo como siempre digo: "Las grandes verdades de hoy serán las grandes mentiras del mañana".
Volviendo a Raúl…si no respetamos su obra, su pensamiento y su memoria no nos respetamos a nosotros mismos, no escupamos para arriba.
Harto estoy de escuchar y de rebatir a quienes opinan o lo juzgan sin ningún fundamento, ya me río cuando aparece algún otro comentario de algun imbécil a quien su editor le ordenó hacer una nota y generalmente lo plagió de algún otro lado con un simple "copy/paste". Y ni que hablar de los infradotados que dicen barbaridades, como que él era un mal escritor porque tuvo problemas con su mujer y luego se suicidó.
Le tengo más novedades, lector: muchos otros escritores también tuvieron tragedias familiares y también se suicidaron, él no fue el único.
No creo que ninguna de todas estas personas haya leído alguno de sus libros, así que su crítica literaria es irrelevante.
Tampoco han investigado lo suficiente la historia de su vida, solo repiten estúpidos y morbosos comentarios que han leído o escuchado por allí.
En el fondo son como infantes que dicen que no les agrada una determinada comida que jamás han probado.
¿Cómo puedes decir que sus libros son deplorables si ni siquiera los has leído?
Con respecto a lo que fue su vida personal, voy a repetir lo que siempre he dicho: su vida y su dinero solo a él le pertenecían, él tenía derecho a hacer con ellos o que le diera la gana sin tener que darle explicaciones a nadie, o ¿Usted no lo hace así?
Hasta la próxima.
GABRIEL WAISBERG
7 comentarios:
Muy bueno Gabriel! excelente!
Excelentes y respetables palabras... cuanta razón hay en ellas.
Me encanta leer a Gabriel Waisberg, alguien me puede informar si tiene sitio oficial o algo?
Muchas gracias.
Fabiola
Gabriel...
Siempre vas a ser el amor de mi vida, siempre voy a amarte. MD
tengo el libro todo estaba sucio tapas de cuero autografiado por el baron visa con birome verde.doc_sandra@hotmail.com
tengo el libro todo estaba sucio de baron bisa autografiado con birome verde.doc_sandra
Con verde? Realmente parece ser una rareza.
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